La caída de árboles lleva al Ayuntamiento a encargar un informe para conocer su estado
La continuada caída de ramas e incluso árboles enteros que se está produciendo en diferentes zonas de Cieza en los últimos años está poniendo en entredicho el Plan Director de Arbolado que el ayuntamiento de Cieza encargó a una empresa privada en 2015 y que comenzó a ejecutarse en 2016. Aunque a día de hoy prosigue, el titular de la Concejalía de Obras y Servicios, Francisco Martínez, confirmó el encargo de un estudio, “a personal independiente” para conocer el estado en el que se encuentra la masa arbórea de la ciudad, sobre todo en las calles donde ya alcanza alturas de más de 20 metros y, en algunos casos, sobresale por encima de un edificio de cuatro plantas.
Esto sucede sobre todo en el barrio de San José Obrero y en la avenida Juan XXIII, donde se están registrando las mayores incidencias. Sin ir más lejos, el viento huracanado asociado a la pasada Dana del 29 de octubre provocó la caída de hasta dos de estos ejemplares, mientras que otros tuvieron que ser mutilados por empleados municipales ante el peligro que presentaban. Además, los vecinos vienen quejándose de manera sistemática de que estos árboles han hecho sus viviendas “se conviertan en la boca de un lobo (Sic) porque no hay luz por ningún sitio, ni en varano y mucho menos en invierno”.
Ello lleva consigo “que tengamos que tener encendidas las luces hasta de día, y también la calefacción, ya que el sol es inexistente para nosotros”, comentan estos vecinos, quienes aseguran que por este motivo, sus facturas de la luz “se han encarecido notablemente”. Por otra parte, usuarios de algunos jardines han alertado de la existencia de grandes pinos “con mucho peligro de caída y cuyas piñas, algunas de casi un kilo de peso, se precipitan a la zona de juegos infantiles. Algunos de estos ejemplares tienen una inclinación de casi 30 grados sobre su vertical, tal y como sucede en el Jardín del Partido, en el centro de Cieza. A pesar de ello “los técnicos municipales inciden en que no hay peligro de caída, y yo tengo que hacer caso a esos técnicos”, dijo el concejal.